La estación internacional de Canfranc es la mayor joya arquitectónica del Pirineo. Fue la estación de tren más grande de España y una de la más espectaculares de Europa. Su objetivo era unir Francia y España por el puerto de Somport, una aplaudida vía de acceso al país vecino que duró apenas 75 años.
Historia de la estación de Canfranc
En 1923 se iniciaron las obras de este proyecto liderado por el ingeniero Ramírez de Dampierre. Finalmente, fue inaugurada el 18 de julio de 1928 en presencia del rey Alfonso XIII y del presidente de la República Francesa, Gaston Doumergue. Lamentablemente, coincidiendo con el inicio de la Guerra Civil española en 1936, la estación pasó a ser controlada por el ejército franquista. Este decidió tapiar el túnel que la unía con Francia para evitar cualquier tipo de fuga o entrada desde el país vecino.
La Segunda Guerra Mundial (1939-1945) supuso el cierre definitivo al tráfico de viajeros. En estos años, la estación internacional de Canfranc llegó a convertirse en un punto estratégico de paso para los espías de la resistencia francesa, judíos que huían del holocausto nazi y toneladas de oro. Este preciado metal viajaba desde Suiza hasta Canfranc. De aquí se trasladaba a Madrid o a Portugal, para luego ser enviado hasta Sudamérica, donde llegaba a manos de nazis exiliados.
Esta estación, que tuvo su época dorada entre 1928 y 1936, ofreció conexiones con Francia hasta 1970. Este año, un tren de mercancías descarriló del lado francés provocando el derrumbe de l’Estanguet. Este fue el motivo de suspender esta conexión entre España y Francia.
El edificio de la estación Internacional de Canfranc
La estación consta de un edificio principal, varios muelles y el depósito de máquinas. Para su construcción utilizaron materiales propios de la época como el cemento, la piedra, el hierro y el cristal. El edificio de pasajeros o principal es espectacular. De planta alargada y completamente simétrico, tiene una longitud de 241 metros y cuenta con 75 puertas repartidas a lo largo del edificio. Construido a 1.194 m de altitud, se caracteriza por los grandes ventanales, concretamente 365, y sus pilares de estilo clásico. Un verdadero espectáculo para la vista y una pena que lleve tantos años en desuso.

El cuerpo central da cobijo al vestíbulo bajo la cúpula central, las taquillas y las ventanillas de información para los viajeros. En los laterales se encontraban el puesto aduanero, la comisaría de policía, correos, las oficinas de las compañías de ferrocarriles del Norte y del Midi y el restaurante del hotel internacional. A la planta de arriba se accedía por una gran escalera de madera y se llegaba hasta las habitaciones del hotel. Además, tenía dos pasos subterráneos.
En la actualidad
El edificio está cerrado al público, pero el ayuntamiento de Canfranc ofrece un servicio de visitas guiadas. El acceso a los muelles es libre y se puede pasear por ahí sin problema. También se pueden visitar los depósitos de máquinas y se pueden ver un par de convoyes abandonados en unas vías de tren hoy cubiertas de hierba o nieve.
La mejor forma de llegar hasta allí es en coche. Hoy por hoy, la estación de Canfranc solo espera la llegada del Canfranero. Este tren viene de Zaragoza y tarda unas 5 horas y media aproximadamente. Si no tienes prisa, quizá te interese el viaje. Si no, siempre puedes alquilar un coche en Goldcar como hicimos nosotros.
Más artículos para viajar por el Pirineo Aragonés
- Pirineo aragonés, el sitio de mi recreo
- Ruta circular al ibón de Acherito en el valle de Hecho
- Ruta al ibón de Plan o Basa de la Mora desde Plan en invierno
- Ruta a los ibones de Ordicuso desde el Balneario de Panticosa
- Forau d’Aiguallut, la sima mágica del valle de Benasque
- Ruta por el valle de Aísa: desde La Cleta hasta el ibón y el dolmen de Izagra
- Ruta circular por los lagos de Ayous desde Astún
- Ruta al ibón y al arco de Piedrafita
- Ruta por el Pirineo aragonés: ibones y vértice de Anayet
- Ruta por el Pirineo: de La Sarra al refugio de Respomuso y bajada al Balneario de Panticosa (GR 11)
- Ruta de las pasarelas de Montfalcó al Congost de Mont-Rebei
- Muralla China de Huesca: ruta por las ermitas de Finestres
- La estación internacional de Canfranc
- Formigal, mucho más que una estación de esquí
- Aínsa, la villa medieval del Sobrarbe
Recuerda que también puedes seguirme a través de mis redes sociales. ¡Te espero!
*Este artículo ha sido una colaboración con la empresa de alquiler de coches Goldcar.
1 Comment
Miriam Jimenez
13 febrero, 2018 at 9:13Muy chuli