Visitar Milán y no subir al Duomo tiene delito, pero te juro que lo intentamos. Cuando llegamos a la puerta de acceso, dos simpáticos militares italianos no nos dejaron subir. ¿Por qué? Muy fácil: durante la noche había nevado y el tejado de la catedral estaba helado, así que niente di niente. ¿Será posible? Lo único que quería hacer en la capital de Lombardía era perderme por el tejado del Duomo y me iba a quedar con las ganas.
Alternativas al Duomo en Milán
Lluvia, agua nieve, frío helador… no importaba, nosotras comenzamos a caminar sin rumbo y con la esperanza de encontrar sobreponernos de la pena por no poder subir al Duomo. Al final, aunque pasamos mucho frío y se nos congelaron hasta las ideas, mereció la pena porque descubrimos un Milán que nos gustó mucho. Lo paseamos tranquilamente, sin un objetivo fijo y debo reconocer que, aunque no esperaba demasiado de esta ciudad, me sorprendió muy gratamente.
Lo primero que hicimos fue cruzar la Gallería Vittorio Emanuelle II que une la plaza del Duomo con la plaza della Scala. Esta galería, construida entre 1865 y 1877, sigue la misma estructura que la Burlinghton Arcade de Londres o las Galeries Royales Sain Hubert de Bruselas. La milanesa consta de dos calles cruzadas cubiertas por una cúpula acristalada y suelos de mármol. En ellas conviven tiendas de lujo como Chanel o Louis Vuitton con históricos cafés como Biffi, fundado 1867 por Paolo Biffi, o el sofisticado restaurante Savini.
10 Corso Como
Seguimos nuestro recorrido y llegamos hasta la peatonal Corso Como. Muy cerca de la estación Puerta de Garibaldi, encontramos por casualidad 10 Corso Como. Esta preciosa galería escondida tras unos grandes portones de garaje aúna arte, diseño y gastronomía. Es un exclusivo espacio multimarca en el que conviven firmas como Givenchy, Yves Saint Laurent, Balenciaga, Valentino, Manolo Blahnik, Alexander Mac Queen… y cualquier otra firma exclusiva que podáis imaginaros. Ahora sí sentíamos de verdad que estábamos en la capital europea de la moda.
Nada más entrar hay un patio desde el que se accede a la tienda multimarca y a la cafetería-restaurante con una decoración exquisita acorde con la carta, obviamente. La terraza del patio estaba vacía pero en verano debe ser un lujo poder cobijarte al fresquito de las enredaderas que cubren la fachada del patio.
La planta de arriba alberga una preciosa librería dedicada a la moda, la fotografía y la música. Un espacio muy diáfano de paredes blancas, mesas de cristal y sillas de diseño. Una pasada de lugar donde perderte entre multitud de libros y alucinar con las preciosas ilustraciones de muchos de ellos. Una suerte de sitio para los amantes de estas disciplinas y el lugar perfecto para pasar una tarde lluviosa como la nuestra.
Cuadrilátero de Oro
Siguiendo los pasos de la exclusividad aparecimos en el famoso Cuadrilátero de Oro. En apenas seis calles se concentra la crème de la crème de la industria de la moda: Armani, Chanel, Jimmy Choo o Valentino, son solo algunas de las tiendas que harán que se te caiga la baba al pasar por sus increíbles y prohibitivos escaparates. En esta zona encontramos una de las pastelerías más antiguas de la ciudad, la pasticceria conffeteria Cova. Fue fundada en 1817 por Antonio Cova, el creador del famoso Panettone (o al menos eso dicen).
Barrio de Brera
En nuestra ruta en busca de alternativas al Duomo en Milán, seguimos caminando hacia el bohemio barrio de Brera, plagado de anticuarios y tiendas de decoración. Si no entramos en todos los que encontramos, poco nos faltó. Es un lugar excelente para tomar un buen aperitivo italiano. Este evento es muy famoso en el país y por un precio bastante módico, incluye una bebida (cóctel, cerveza, refresco, vino) y toda la comida que quieras durante unas horas determinadas de la tarde.
Plaza del Duomo
Pero sin ninguna duda, lo que más nos gustó de Milán fue el panzerotti de Luini, un pequeño local en una callejuela cercana a la catedral. El panzerotti es como una empanada rellena de mozzarella, tomate y cualquier ingrediente que se te ocurra. Está francamente delicioso y comerlo sentados frente al Duomo hace que se te olvide que el frío se te ha metido en los huesos y que el agua nieve comienza a calarte el abrigo.
Nuestro intenso día en busca de alternativas al Duomo en Milán nos llevó a descubrir tiendas, barrios y restaurantes y estupendos para terminar de exprimir la capital de Lombardía.
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10 Comments
Sonia - La Zapatilla
27 enero, 2014 at 14:27Fíjate, yo que creía que Milán era una ciudad fea y aburrida… a parte del Duomo, claro está. Y después de leer tu artículo y ver las fotos que lo acompañan he cambiado de opinión. Me iría ahora mismo a la caza de uno de los pasteles de la pastelería Cova. También me han encantado esas tiendas del barrio de Brera… Ya me veo buscando una excusa este año para visitar Milán!!! :-))
Marta Aguilera
3 febrero, 2014 at 0:04Yo también pensaba eso Sonia, que Milán era solo el Duomo y punto. Y al final, si la exprimes un poquito tiene su encanto!! Hasta pasear por tiendas de súper lujo tiene su aquel, aunque no compres nada, jejeje.
Te animo a visitar Milán, aunque sea solo como centro base para conocer la preciosa Bérgamo y el Lago di Como!!
Edu y Eri Viajes
29 diciembre, 2013 at 13:05Nos están encantado los posts sobre Milán. Hemos estado varias veces a puntito de ir, y leyendo entradas como ésta lo único que podemos hacer es tirarnos de los pelos por no haber viajado aquí ya XD Besotes!
Jordi (milviatges)
21 diciembre, 2013 at 20:49Sin ser la ciudad más bonita de Italia, Milan bien merece un par de días. Por cierto, las chicas que no intenten entrar al Duomo en tirantes…no las dejarán. Esto le pasó a mi compañera y se tuvo que quedar fuera mientra yo lo disfrutaba… 🙁
Maria / Lugares que visitar
13 diciembre, 2013 at 23:14Una de mis ciudades favoritas!!!
Marta Aguilera
16 diciembre, 2013 at 11:11Es una ciudad muy bonita y con muchas posibilidades. A mí me sorprendió mucho!
sara alvera
13 diciembre, 2013 at 22:43Marta me ha encantado la información que pones de Milán. Me han entrado ganas de volver para descubrir esos lugares que describes. Me encanta tu blog. Sigue así porque tu trabajo aunque no lo creas resulta muy gratificante a los que no podemos viajar.
Marta Aguilera
16 diciembre, 2013 at 11:11Muchísimas gracias Sara!! Comentarios así animan mucho cuando las fuerzas flojean!!! Un abrazo!!! =)
Naroa
12 diciembre, 2013 at 0:57He dado un vistazo a tu blog y me ha encantado, me quedo por aquí si me lo permites. saludos desde Uruguay, Sudamerica
Marta Aguilera
16 diciembre, 2013 at 11:10Bienvenida Naroa y muchas gracias!! 🙂