¿Te has planteado pasar unas vacaciones diferentes? ¿Salir de tu zona de confort y vivir nuevas aventuras? Si es así, te aseguro que alquilar un velero en Croacia puede transformar un viaje de verano normal en la mejor experiencia de tu vida.
Además de ser uno de los destinos favoritos de Europa para hacer un roadtrip y recorrer su costa de punta a punta, también lo es para navegar en velero. Ya te voy anticipando que navegar por las cristalinas y tranquilas aguas del Adriático será uno de los mejores recuerdos que guardes de este viaje. Sin olvidar de las maravillosas puestas de sol y amaneceres que podrás contemplar a bordo del velero.
A continuación te dejo algunos consejos para que alquilar un velero en Croacia sea un recuerdo imborrable.
En velero por Croacia
Los más de 2.000 km de costa bañada por el mar Adriático te están esperando si alquilas un velero en Croacia. Una forma muy original y diferente de disfrutar de las maravillas que ofrece este precioso país. Además, navegar por las tranquilas aguas del Adriático es garantía de descanso y relax. Justo lo que todos buscamos en nuestras vacaciones.
Otro de los motivos por los que alquilar un velero en Croacia es todo un acierto es porque te permite diseñar tu viaje a medida. Cada viajero tiene unas circunstancias y un estilo de viaje diferentes, así que dependiendo de tu situación, de tus gustos y de con quién vayas, podrás elegir tanto las características del velero como el recorrido y los planes. Estarás de acuerdo conmigo en que las necesidades en un viaje con amigos y las de uno en familia, y más aún si viajas con niños, son totalmente diferentes.
La mayor ventajas a la hora de recorrer la costa croata en velero es que las distancias suelen ser muy cortas. Por eso, navegar en Croacia es la mejor forma de visitar varios lugares en tan solo un día. Se acabó eso de invertir más tiempo en los trayectos que en el destino en sí.
Las playas: anfitrionas y protagonistas
Uno de los principales atractivos de Croacia son sus preciosas playas de agua cristalina y de un increíble azul. Lo que las hace tan especiales, además de ser de piedras (no te olvides las cangrejeras) es que están situadas en medio de la naturaleza y la gran mayoría son completamente salvajes.
La Playa de Banje en Dubrovnik es una de las mejores opciones si viajas con niños. Las aguas son tranquilas y se puede acceder a la playa paseando. Lo mejor es que la ciudad está al lado y ahí tienes todo lo necesario para pasar un día completo con los más pequeños. Por cierto, ya que estás en Dubrovnik, no te pierdas la cala de Sveti Jakov. ¡Te encantará!
A pocos kilómetros de Dubrovnik se encuentra la isla de Lokrum, otro de esos lugares salvajes en los que merece la pena hacer una parada. Un islote en el que no vive nadie y tiene rincones donde se respira auténtica paz y tranquilidad, sobre todo si viajas en velero.
Otro de los lugares de parada obligatoria es el Parque Nacional de Kornati, donde encontrarás playas vírgenes rodeadas de naturaleza. Se encuentra entre Zadar y Sibenik, y sin duda es un paraíso terrenal. La cercanía a estas dos ciudades es el complemento perfecto para disfrutar de un día redondo de playa y visitas culturales.
Hablando de Parques Nacionales, no te puedes perder el de los Lagos de Plitvice. Este es otro de esos lugares únicos e icónicos que no debes pasar por alto si viajas a Croacia. Aunque para ello tendrás que dejar amarrado el velero durante al menos un día, pues este precioso parque se encuentran en el interior del país.
Rincones mágicos en Croacia
Croacia tiene infinidad de rincones espectaculares que te desgrano, uno a uno, en estos artículos. Aún así, aquí tienes un pequeño resumen de las visitas imprescindibles. De esas que hay que ver sí o sí y sobre las que organizar tu próximo viaje a Croacia:
Piérdete por las callejuelas de Dubrovnik, sobre todo por la tarde noche que es cuando hay menos gente y se puede disfrutar mejor de la ciudad. Teletranspórtate a la antigua Roma visitando el anfiteatro romano de Pula. Contempla la belleza del Palacio de Diocesano de Split. Maravíllate con el órgano del mar de Zadar y no te olvides de admirar los preciosos azulejos de la Iglesia de San Marcos en Zagreb.
Estos son solo algunos de los lugares más bonitos y famosos, pero lo cierto es que Croacia está abarrotada de lugares que merecen ser vistos con nuestros propios ojos. Este país es, sin duda, una fábrica de recuerdos inolvidables. Un país repleto de lugares con encanto esperando sorprenderte como lo hace con tantos y tantos turistas que deciden apostar por este fantástico destino.
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